Performance Art. Los «labs» como espacios performativos.

El Performance art si bien se desarrolló como acción o práctica hacia las décadas de los años 70 y 80 tiene dentro de sus orígenes a las vanguardias europeas de principios del siglo XX, con creadores vinculados al futurismo, el dadá o el conceptualismo, a los nuevos enfoques de las artes visuales y los “movimientos experimentales” dentro del teatro y la danza de principios del siglo XX.

El Performance incluyo desde sus orígenes una variedad de manifestaciones o acciones fuera del mainstream cultural, con acciones dirigidas hacia comunidades artísticas “muy limitadas”, teniendo como sustento la experimentación, la oposición al pensamiento y discurso lógico, dicotomías (lo personal y lo público, por ejemplo), el proceso sobre “contenido y producto”, hasta acciones vinculadas a la sobreproducción, consumismo, ecología y preocupaciones sociales.

“Performance Art” realiza una reseña histórica del arte del performance en sus dimensión histórica, corpórea y teatral, además ejemplificar en determinados contextos históricos la evolución de las temáticas del performance, en tanto “Provoking the Everyday” y ”Still Life” ofrecen el registro de la acción además de la reseña de estas evidenciando la acción del cuerpo y el artista.

Como vínculo entre lecturas estas hacen hincapié en la manifestación corpórea, las cualidades expresivas del cuerpo y la teatralidad de la acción, que van desde la realización de acciones como caminar en público, presentaciones, actividades físicas, funciones corporales y actividades habituales e incluso inusuales como la exposición a situaciones extremas como electrocución o encierro, siendo el cuerpo del artista un sustrato de experimentación, entendido como sujeto y objeto de la obra o como señala el texto “el verbo y sujeto convertido en uno”.

Tomando como referentes los conceptos de cuerpo, acción, transgresión y visualización física del performance art podríamos establecer un nexo entre esta corriente y las actuales tendencias asociadas a la experimentación en “labs”, desde su discurso respecto al conocimiento libre y democratizador, (en el contexto de la ciencia abierta o ciudadana), los movimientos sociales – científicos hasta el biohacking, donde no solo el cuerpo es un sustrato de experimentación, acción – intervención y modificación, sino también la materia viva que lo compone a nivel de tejidos, neurotransmisores y la información genética que este contiene, pudiendo ir desde el secuenciamiento genómico, la implantación de dispositivos sub-endémicos, ensayos directos sobre de químicos o fármacos, clonación o transgenia.

¿Si el performance hasta mediados de los años 90 considero dentro de sus acciones la política, las preocupaciones ecológicas, económicas y sociales, hoy por hoy son los laboratorios de co-creación libre, la experimentación sobre sustratos biológicos y las tendencias “open” y su disidencia una nueva concepción del performance asociada a las ciencias y la tecnología o son los “labs” la sucesión lógica del performance?.

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